Es irónico que el gobierno obligue a las empresas a que sus trabajadores fichen para que paguen impuestos por las horas extras y por otro lado, sea conocedor de que tiene a unos cientos de deportistas sin contratos, trabajando en clubes deportivos de manera ilegal y no haga nada. Sin cotizaciones reales o intentando hacer contratos parciales con unos salarios irrisorios de 8.000 euros ANUALES. Y lo consienta. Este año quiere saber las horas extras que hacen el resto de los trabajadores. ¿Por qué no actúa sobre las deportistas? Si el Estado fuera consciente de que una empresa tiene trabajadoras ilegales, ¿lo permitiría? Esto es violencia contra las mujeres. Violencia Institucional.
La ley del deporte obsoleta. La ley de Igualdad, inoperante. El convenio deportivo inexistente. Y la prima por ganar la liga, menos de 60 euros por jugadora.
La huelga de las jugadoras de fútbol pone sobre la mesa la perpetua discriminación de las mujeres en el deporte. Informe Semanal, se hace eco de la noticia en este reportaje.