Gracias por hacer este premio posible. La AMDP Premio Nacional 8 de Marzo por el Ayuntamiento de Getafe
Después de varias nominaciones, le comentaba a la Alcaldesa Sara Hernández, que era nuestro primer premio. Así que además de estar agradecidas por esta estatuilla que repartimos entre todas las mujeres que hacemos cada día la AMDP, Getafe se quedará en nuestro ADN como ese primer premio que recibimos. Un premio que nos llena de energía, además de ser compartido con mujeres luchadoras que nos han marcado mucho camino en esta vida, una en especia con quien lo compartimos, Carmen Alborch, allá donde estés, gracias por todo lo que nos dejaste… Hambre y ganas de pelear
Os dejamos una galería de fotos del evento y de la pequeña celebración que tuvimos después. Pero antes, quiero agradecer a Pilar Calvo, por su incansable trabajo como Secretaria General, sin ella, nada de esto sería posible. Es ella quien cose cada día todas las ideas que vamos desgranando y tiene la habilidad de ser Campeona de España de Skeet y enfrentarse cada día a hacer crecer esta Asociación para Mujeres en el Deporte Profesional.
A nuestras Vicepresidentas, Clara Sainz de Baranda y Carolina de Pando, que nos acercan al deporte desde ángulos diferentes y complementarios. Una desde la investigación y la docencia en la Universidad Carlos III donde sus estudios sobre la presencia de las mujeres deportistas en los medios de comunicación son referenciados constantemente y la otra, desde las afortunadas aguas gaditanas, donde un club de esgrima, se ha convertido en referente nacional e internacional por su fabulosa puesta en escena de las competiciones. El Bahía de Cádiz.
Agradecer Mamen Hidalgo su incorporación a estas filas, a Verónica Jurado por seguir llevando orgullosa ser una de las socias fundadoras. A Ana Liria Franch, que nos acompaña desde la pelea y el apoyo constante, a Victoria Caturla, que ha entrado como responsable de relaciones Institucionales que ya están dando sus frutos.
Pero sobre todo, a todas las que estáis fuera de estas fotos y que cada día hacéis esta AMDP más grande, más visible y más efectiva. En un momento donde el deporte femenino tiene un punto de giro importante, es imprescindible tener muchas manos con las que remar y llegar al destino de la igualdad real.
El deporte, sigue siendo un territorio donde las mujeres estamos discriminadas. No tenemos una ley que nos defienda ni contemple como profesionales. Y estamos agotando la segunda década de este siglo XXI.
Nos queda mucho trabajo, muchos desafíos por delante, por eso, os animo a todas a participar y a ser parte de esta AMDP. No nos vamos a conformar con menos de lo que nos corresponde. Y eso es la mitad de todo.
Somos deportistas, psicólogas, abogadas,entrenadoras, juezas, periodistas, gestoras, estudiantes y maestras. Y todo lo que se nos ocurra. Estamos en un país que no nos da el espacio que nos corresponde, pero que nos exige tener las mismas obligaciones sin tener ni el 14% de las oportunidades. En todas las áreas. En todos los espacios laborales y de toma de decisión estamos discriminadas. Somos un ODS, el número 5.
Que este premio, nos ha dado fuerzas morales. Pero seguimos necesitando más apoyo económico para hacer frente al trabajo de cada día. La precariedad es compartida. Venimos de la nada y hasta ahora sólo las cuotas de las asociadas, mantienen precariamente esta asociación. Sumemos todas, cada vez nos vamos abriendo a más frentes. Y cada vez, vamos siendo más.
Va por todas. Las que creemos que las reglas del juego deportivo están en manos de unos señores que no van a abandonar sus cuotas de poder... porque hasta ahora ni lo han hecho, ni han dado indicios de hacerlo. La historia nos ha llenado de ejemplos de cómo se arrebata el poder. Es la parte que nos toca. Estar en la toma de decisiones para que las tornas cambien y podamos ser iguales.
Los ODS nos piden alianzas, únanse señoras, o esto no habrá quien lo mueva. También nos piden tener unas instituciones libres de corrupción, otra de nuestras lacras. La construcción del nuevo contrato social nos debe de incluir, y sobre todo, nos debe dejar participar. Porque o somos nosotras las que nos ponemos en esos espacios de poder, o pasarán otros 200 años… y a mi, me va a pillar mayor.