Hemos pasado un año de aprender que el deporte femenino sigue necesitando mucha atención. Demasiados retos para las más de 771.746 mujeres deportistas federadas en nuestro país. Somos el 21,5% frente a los 78% 2.814.387 de licencias masculinas. En los cuadros técnicos, los datos no existen o son irrelevantes. Este es país que no quiere mucho a sus mujeres. Lo hemos comprobado este año donde muchas de vosotras os acercáis a la AMDP para contar que las cosas, no van bien. Que después de la foto de la medalla, la realidad se muestra oscura.
Este año hemos aprendido que ser medalla olímpica no garantiza una continuidad en al carrera deportiva. Y llegar hasta conseguir ese puesto entre las mejores del mundo, después del esfuerzo y del sacrifico, de ser Marca España y de llevar a lo más alto cualquier carrera deportiva, no es garantía de nada. Tampoco lo es la copa del mundo, ni de Europa… y eso si ganas. Y si no? Y si te lesionas?
Tenemos demasiados frentes a los que seguir atacando con fuerza. Una ley del deporte de este siglo XXI donde la igualdad 50-50 sea un hecho y no un titular. Unas políticas audaces capaces de desmontar el abandono de las mujeres en el deporte. Unas leyes que acaben con la corrupción y con la mala gestión de las federaciones. Unos medios de comunicación públicos que corten desde ya el abuso sistemático de los canales de televisión para exhibir cada día, en prime time los logros del fútbol masculino. Un dinero que se paga con los impuestos de todas y todos y que incumple hasta la obscenidad cualquier ley de igualdad. El derecho a la información, incluida la información deportiva debe de ser tratado con todo el rigor e igualdad. Hay muchos deportes, esos que llaman minoritarios ( sic) y cada fin de semana, tenemos campeonas en este país.
Los viejos mantras que amparan la audiencia en una RTVE de servicio público, ya no sirven. Ni para las televisiones autonómicas ni locales. Deben de sustentar un servicio a la ciudadanía. El dinero público y su gestión deben de estar sometidos a una ley de transparencia. Y no a la lamentable situación de invisibilidad a la que las mujeres están sometidas con la complacencia del 50 % de la población masculina. Un 90% de deporte masculino frente a un escaso 5%. Seguimos ahí. Por mucho que el señor secretario de estado diga que hemos conquistado portadas. Será en sueños. La realidad es muy clara. La relación con la visibilidad y el patrocinio está unida. La invisibilidad y la ausencia de recursos económicos es la misma de siempre.
Tampoco nos sirven estos grandes alardes de publicidad institucional, donde lo que supuestamente iba a ser la luz verde para el deporte femenino, se basa en unos ingresos (que se iban a hacer de todas las maneras) de 2M y unas deducciones fiscales del 90%. Y una prima por ganar la liga para cada jugadora de 53 euros. Eso, es el abuso de los derechos de imagen de las mujeres deportistas porque no reciben una remuneración acorde ni profesional. Y eso, con las bendiciones de un CDS que se ampara en programas que venden a bombo y platillo y que estamos testando son a todas luces ineficaces e insuficientes. De momento, no llega al 9% el número de mujeres beneficiadas en ayudas a los estudios, o cursos o matrículas o ayuda para cuidado de la prole. Nada que veamos que es específico de la mujer. Así que seguiremos instando a que este programa desaparezca por carecer de utilidad. Que se incluya en los presupuestos generales y que se reparta al 50-50. Con políticas que incentiven la participación igualitaria de las deportistas incluyendo los cuerpos técnicos.
Las políticas sirven, las leyes son necesarias, su cumplimiento obligado y su incumplimiento penado.
Hemos preparado una memoria con todas las actividades que hemos hecho y ahora nos juntaremos para preguntarnos qué vamos a seguir haciendo en el próximo año. Ampliar las alianzas con todas vosotras. Seguir escuchando los problemas que hay en el deporte femenino y sobre todo, construir.
Es básico seguir aumentando el tejido asociativo deportivo para poder tener mayor capacidad organizativa. Debemos ser más responsables con nosotras mismas y creer que podemos profesionalizar y monetizar el deporte como forma de vida. SI. Queremos y podemos vivir del deporte. Y para eso, seguiremos insistiendo en la necesidad de que os asocies. Cada club, cada equipo, cada deporte. Por comunidades o por deporte. Nos dá igual. Con la AMDP o con la Asociación de mujeres de ciclismo Asturiana. Señoras, es la única manera de ser más efectivas en nuestras peleas y reivindicaciones, Asóciense. Y verán que hay muchas reivindicaciones comunes.
Porque cuando hablamos de igualdad, hablamos de todas. Atletas, periodistas, paralímpicas, entrenadoras, deportistas, fisioterapeutas, árbitras…. todas a una para conquistar este espacio que es nuestro por derecho. Y todas unidas. Con las madres que nos apoyan, las empresas que nos financian y algunos hombres que se están sumando a este reto de acompañarnos en el camino de la igualdad.
Tenemos uno de nuestros doce retos conseguidos. El programa de España Compite se podrá utilizar esperemos que pronto. Un programa que sirve para que el dinero que os donan empresas y familias puedan tener una deducción fiscal del 40%. Está aprobado y esperamos que lo vuelvan a poner en marcha pronto y nos beneficiemos todas. ( y todos)
Gracias por ser. Por estar y por enseñarnos cada día que esto no es fácil. Para que no abandonemos y seamos cada vez más. Que nos tenemos y que hay que seguir peleando.
Estamos juntas y estamos cambiando las reglas del juego.
Disfrutemos de los fuegos. Celebremos. Y volvamos al trabajo.